martes, 10 de julio de 2007

Pasamos a publicidad

Esa del título es una de las frases que más odio; porque normalmente es pronunciada en el momento más inoportuno posible. Sabes que vas a estar más de 20 minutos (no confundir con el periódico) viendo anuncios que has visto mil veces; y que no vas a estar viendo lo que quieres.

Empiezan a pasarte por delante un montón de peliculillas de 20 segundos hechas con más o menos maestría. A mí, por ejemplo; me gusta ver anuncios nuevos, salen cada 15 días. Pero una vez los has visto dos veces, comienzan a hacerse pesados, y se convierten en uno más como todos.

Pero entre ese alud de chorradas; se salvan contadas excepciones, que para mí son obras maestras de la publicidad, capaces de emocionar y de provocar sensaciones; haciendo que se te quede grabado a fuego el producto que anuncian. Todo esto viene a cuento de que ayer estuve viendo anuncios en el Youtube, para intentar bajarme la música de algunos que me han gustado últimamente. Me tropecé entonces con mi anuncio favorito de toda mi vida. Es el anuncio que más me ha transmitido por mis circunstancias personales. Es este. Me encanta por que hace algo que me gusta y me hace sentir bien. Mezcla el dibujo técnico, la razón, algo frío; con el cuerpo humano, las emociones, algo vivo. Cuando yo hacía dibujo técnico, me gustaba de vez en cuando encontrar alguna sensibilidad artística tras esos dibujos hechos a compás y escuadra; y en algunos lo encontraba. Entonces, me sentía bien. Al ver este anuncio, encontré además de algo curradísimo; el espíritu de esta mezcla que a priori parece imposible, pero que los creativos publicitarios han conseguido. Chapó.

Otro anuncio mítico, y con esto termina mi galería de favoritos, es aquel de la Coca-Cola. Todos recordamos el de "Para los altos, para los bajos.." Es increíble lo que se puede llegar a hacer con unas botellas y unas latas de Coca-Cola. Intento pensar si yo hubiera sido capaz de tener tantas ideas y creo que sería imposible. Hay que ser creativo publicitario argentino para eso (hay que decir que los argentinos son los putos amos en publicidad). Este es otro anuncio que emociona.

Después, de este, descubrí el otro día uno de este estilo, también de Coca-Cola, basado en el cine y la televisión; hecho con tanta o más genialidad como el primero. Y todo tan simple como una botella/lata de Coca-Cola.

Amigos, hay que estar atento a los anuncios, a ver cual será la próxima obra maestra de la publicidad. Mientras tanto, habrá que cribar entre la basura que interrumpe nuestros programas favoritos.

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