Héroes, Lost, Fringe, Pretty Little Liars, Friday Night Lights, The Big Bang Theory
Como en los ejercicios del cole "busca el elemento discordante". De todos, el más discordante es Pretty Little Liars, por su aparente falta de frikismo, que sea una serie para ir tirando. Sinceramente, al terminar el primer capítulo me planteé seguir viéndola, pero...
Pero sí, estoy escribiendo algo que negaré en público fuera de este blog convirtiéndome en un Handsome Little Liar; estoy viendo Pretty Little Liars; y como diría Milhouse cuando monta en la bici de Lisa, ver esta serie "es preocupantemente cómodo". Y es que me está gustando, y no solo por las chicas (que también). El caso es que no puedo encontrar la razón por la que no puedo dejar de ver esta serie, aún y tener unos argumentos bastante trillados, unos acontecimientos casi tópicos, unos diálogos predecibles y un contenido "friki" casi inexistente.
En Lost, llegué por su fama y me quedé por la serie. En Friday Night Lights, llegué por el football y me quedé por la (excelente a la par que desconocida) serie. En Pretty Little Liars, llegué por las chicas y todavía no sé por qué me quedé. Pero me he quedado.
Ya os diré qué es lo que me ha enganchado si es que consigo llegar a darme cuenta.
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