sábado, 12 de septiembre de 2009

Despedida del verano

"Apuro mi verano como un Joaquín Sabina sin inspiración apuraría el whisky mezclado con el agua de los cubitos en un vaso chato". Esta metáfora se me acaba de ocurrir mientras hacía pis antes de ponerme a escribir esta entrada. Apuro las últimas horas de vacaciones haciendo exactamente lo mismo del resto del verano. Jugando a SimCity 4, paseándome por Simtropolis, viendo series (ahora estoy con Friday Night Lights, buenísima), y arrastrándome por la vida si no estoy con mis colegas. Lo mismo que en Julio y Agosto.

Cuando cierre los ojos y recuerde este verano, lo haré de dos formas. Primero se me aparecerá Londres y después Terrassa. Cara y cruz de una misma moneda. Sentiré los 35 grados en mi habitación y las discusiones de los vecinos entrando por la ventana. De fondo sonará el "Tonight, Tonight" de un grupo que todavía ni sé como se llama.

Y ahora, sólo pensar que dentro de un día y medio habré vuelto a la casilla de salida y me entra el pánico. Ha llegado un momento en que el tema social ya me da igual, estoy jodidamente preocupado porque no me acuerdo de nada de lo que aprendí un año y medio atrás. Me atrevo a decir que estoy más acojonado ahora que cuando entré en la ETSEIAT.

Supongo que lo estoy porque hace dos años entré sin saber donde me metía y me cayeron infinitas+1 hostias. Ahora sé dónde me meto, sé por donde caerán y por tanto, sé que me caerán de un momento a otro. Es como cuando ves a los matones de clase que vienen a por ti. No corras, será inútil intentarlo. Mejor aguanta los golpes y procura que no te den en la cabeza... Sí, es un planteamiento bastante cobarde, pero pensad que estas líneas están escritas por un cobarde de la vida.

De nuevo en la casilla de salida. Me que quedado sin blanca e hipotecado hasta las cejas en el Monopoly. Alguien ya se ha hecho con la Herencia de Tía Ágata. He llegado el último en el Scalextric y he caído en la calavera del Juego de la Oca. Para colmo me han tocado los tres seises seguidos en el parchís.

Vida... ¿echamos una revancha?

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hay que ver en qué momentos se le ocurren las metáforas a uno... :-)

A por ellos, que no tienen ni media hostia, si se me permite el exhabrupto.

Suerte!

Daniel Alarcón dijo...

Gracias, Anónimo. Aquí exhabruptos los que quiera, yo soy el primero en lanzarlos cuando las cosas van mal dadas. Son las dos de la mañana y debo levantarme a las siete menos cuarto, no puedo dormir. Serán los nervios?