martes, 27 de abril de 2010

Personajes

Esta es una entrada para matar el tiempo; un juego conmigo mismo. Me acaba de venir la pregunta a la cabeza: "¿Qué personajes de ficción y reales han marcado mi vida?" Estos son los resultados.

REALES CONOCIDOS EN PERSONA
(Padre, madre, abuelos, primos y demás parentela al margen igual que amigos)
-Mi profesor de Tecnología Industrial durante bachillerato y tutor del "Treball de Recerca": ¿Quién dijo que el bachillerato tecnológico es para gente aburrida?
-Mi profesora de Sociales durante la ESO: Aprender sin darse uno cuenta.
-Mi actual profesor de Matemáticas: Alguien que puede imitar a Chewacca mientras habla de hiperespacios vectoriales amén de otras muchas curiosas aficiones, es digno de mención.

REALES ACTUALES NO CONOCIDOS EN PERSONA
-Michael Schumacher: "Die Kaiser".
-Pep Guardiola: Un tipo que hace de mi equipo el Mejor Equipo de Fútbol de la Historia además de haber sido mi jugador favorito del Barça cuando yo era pequeño, diría que me ha marcado.
-Dan Brown: ¿Por qué cuanto más despreciado es, más ganas me entran de leer sus libros?
-Ross Brawn: Un ejemplo a seguir, "de mayor quiero ser como él".
-Steve Jobs: Lleva gafas (como yo), se está quedando calvo (como yo), tiene algo de barriguita (como yo) y habla un inglés tan perfecto que lo puedes entender sin esfuerzo alguno (no como yo). Y también por no sé qué de iPod o iPad o algo así...
-Will Wright: Creador de la saga SimCity, no hace falta decir nada más.
-Andreu Buenafuente: El Señor de las Risas.
-Tarja Turunen: Nightwish, antes molabas... ¡Nightwish sigue molando!
-Carlos Tarque: De entre todos los líderes de grupo musical a los que admiro, creo que éste es el que más.

REALES HISTÓRICOS
-Manuel Azaña: Cuanto más te conozco, más me gusta tu rollo.
-Barack Obama: Demasiado tarde, ya está dentro.
-Jordi Pujol: No por que sea santo de mi devoción, pero cuando sale por la tele todavía creo que es President; cosas de haber estado gobernando durante gran parte de mi infancia y adolescencia.
-Francisco Pi i Margall: Con dos cojones.
-Enzo Ferrari: el Padre Creador, además de un tipo bastante especial...
-Isaac Newton: ¿Cuántas veces habré escrito su Segunda Ley?

PERSONAJES DE FICCIÓN
-Homer Simpson: The one and only.
-Hiro Nakamura: El más simpático de la tropa de Héroes.
-Sheldon Cooper: A veces lo mataría, pero casi siempre por envidia.
-Kate Austen: Sí, soy una asesina y una fugitiva pero te he salvado la vida.
-Robert Langdon: El experto en simbología religiosa más enrollado a ese lado del Atlántico.
-Joan Anguera "Flanagan": He pasado mi adolescencia resolviendo casos junto a él...

Por ahora no se me ocurren más, supgongo que iré añadiendo.

lunes, 26 de abril de 2010

Arriba, Abajo

Ya debería estar acostumbrado, pero no es así. Me gustaría ser una de esas personas que tienen una carga de trabajo compensada a lo largo del mes, o del año. No digo que quiera ser rutinario, pero la verdad es que me cuesta estar de semivacaciones una semana e ir de culo la semana siguiente.

Un día te encuentras haciendo la ruta habitual de Facebook - Simtropolis - Facebook durante toda una tarde mientras que a la siguiente tienes dos exámenes, unas clases particulares de química que dar y un Barça-Inter que ver y vivir con la máxima intensidad posible. Mi actividad en internet se ha reducido bastante, y de hecho, ahora debería estar estudiándome las diferencias entre los modelos de oligopolio de Cournot, Stackelberg, Bernard y las diferencias de los tres con el oligopolio colusorio. ¿Cosas de la ingeniería?

Esta es una semana un tanto rara. Hoy es lunes, pero me da la sensación de que es miércoles de todas las cosas que he hecho hoy y las que he hecho este fin de semana. Mañana tengo que afrontar seis horas seguidas de clase con las ganas rozando los cero grados Kelvin (o los cero Rankine si eres anglófilo...) y contando las horas para el partido de la Remontada. Todos los culés estamos esperando al miércoles y se nos nota, sobretodo en las tertulias de la radio, que ya se habla de anaconda en vez de gusanito en la tripa.

¿Las clases? Bien, gracias; el único problema es que las doy en la otra punta de la ciudad y no me fío de los autobuses rubinenses, así que mientras tanto hago un poco de turismo urbano destrozándome los pies por esas calles. Mis profes de química (los muchos que he tenido) se sentirían orgullosos de ver que no he olvidado absolutamente todos los conceptos que me quedaban. En una escala del 0 al 10 recuerdo los siguientes conceptos:

Reacciones redox: 8/10
Estequiometría: 3/10
Estructura atómica: 7/10
Estructura molecular: 4/10
Enlace químico: 4/10
Teoría de gases: 5/10
Ácidos/Bases: 0/10 (era algo que ya se me daba mal en mi época)
Disoluciones: 2/10
Cinética química: 1/10
Termoquímica: 1/10
Formulación inorgánica: 6/10
Formulación orgánica: 7/10

Lo mejor de todo es que estoy dando clases de lo que mejor recuerdo, ¡así que puedo decir que me ha tocado la lotería!

Poco más, depende de como vaya la Remontada escribiré o no; ya veremos. También dependerá de cómo vaya lo demás, incluído el estado de cierto "chofismo" en el que todavía me encuentro. Supongo que todavía sufro los efectos secundarios de lo del jueves pasado...

jueves, 22 de abril de 2010

Diez Minutos

Diez minutos es lo que duran cada una de las dos tandas de anuncios durante los capítulos de Los Simpson y la sección de meteorología de TVE. Diez minutos es el nombre de una revista del corazón. Diez minutos es lo que duran algunas canciones instrumentales de power metal. Y por último, diez minutos es lo que tarda un tren de FGC en cubrir el trayecto entre las estaciones de Terrassa y Rubí.

Diez minutos pueden cambiar tu vida para siempre, se pueden hacer muy largos o muy cortos, y algunos, pueden llegar a no olvidarse nunca.

Creo que los diez minutos serán de esos últimos. No puedo decir cada día que me haya "enamorado". Lo pongo entre comillas porque qué sabré yo qué es eso del amor; pero en serio, esta chica era algo más que una de esas que ves por la calle y dices "es guapa" o "me la llevaba al callejón de atrás y le daba lo suyo". No, esto ha sido diferente. Unas están buenas, otras son inolvidables.

Esa chica pelirroja, mediana altura, ojos marrones (algunos dirían que con demasiado maquillaje), ropa discreta, pantalones y botas a juego, bolso marrón en un hombro y carpeta de la UAB en el brazo libre; nunca la había visto por la estación, me habría fijado.


La he mirado en el andén y he apartado la mirada décimas de segundo después. Cuando el tren ha parado para que subiéramos, de entre todos los asientos libres del segundo vagón ella ha elegido el que quedaba libre a mi lado.

Paréntesis: no sabéis lo que me llega a reventar que se siente alguien justo a mi lado cuando están los dos asientos de enfrente y los de medio tren libres. ¿No es mejor ir más anchos? Tengo que decir que esta ha sido la primera vez en la que no me ha molestado. Sigo.

No es que me haya fijado en ella por el hecho que se haya sentado a mi lado, ya me había fijado en el andén. Pero durante los diez minutos de trayecto se me han pasado infinidad de cosas por la cabeza, pensaba tan fuerte que tenía miedo que ella pudiera oírlo. Llegando a Les Fonts he visto la Madre de Mis Hijos, mi Media Naranja, aquella que se pregunte qué gracia le veo a veintidós tíos con corazas y mallas dándose hostias en un continente que no es el mío a las tres de la madrugada.

Ahora mismo, mataría a alguien sólo por saber su nombre.

Mientras la Riera de Rubí desfilaba a nuestro lado camino del río Llobregat, se me han pasado por la cabeza miles de frases de cortesía, miles de formas con las que empezar una conversación, cada una peor y más patética que la anterior. Millones de mirarla A Través De Mis Gafas.

Pues ha pasado lo que tenía que pasar. No le he dicho nada ni ella me ha dicho nada a mí, incluso ella habiendo recibido un mensaje de texto a medio camino. Me he pasado todo el trayecto en la misma postura, mirando por la ventana y, a cortos intervalos, mirándola a ella a través del reflejo en un cristal próximo. He visto que ella también miraba por la ventana. Al llegar a Rubí, me he levantado, mi mochila ha tocado su pie derecho sin querer y he salido del tren; con la sensación de haber dejado pasar la oportunidad de haber cambiado mi vida. Ya lo hice una vez hace años, ¿por qué no una segunda vez? No lo sé, si lo supiera, no estaría escribiendo este post.

En el andén de Rubí, me he encontrado un ex-compañero de clase del instituto y subiendo las escaleras mecánicas me han entrado ganas de llorar. Muchas, pero me las he aguantado. El camino a casa desde la estación se me ha hecho muy largo y he tenido que ceder a mi Chica Anónima un espacio en mi memoria. Aunque sea para reconocerla de nuevo si el jueves que viene la vuelvo a ver.

Cerebro mío, te odio.

sábado, 17 de abril de 2010

Post-Parciales

Sí, amigos. Faltaba esta entrada acompañando los típicos sentimientos post exámenes parciales. Es la época del cuatrimestre en la que paso de la actividad cerebral frenética al encefalograma plano de un día para el otro, incluso en una sola tarde.

Es el llegar a casa y pensar: "Ahora faltan las notas, pero estos días de relax no me los quitará nadie hasta que salgan dichas notas."

Con los parciales terminados, me estoy dando cuenta que estos días estoy mucho más inactivo de lo normal, con menos ganas de empezar a adelantar materia y con preocupantes índices de aburrimiento. Ya me he terminado la tercera temporada de Perdidos y supongo que empezar a ver la cuarta será dicho y hecho. Por supuesto, entre actividad y actividad hay tiempo para entrar en el campus virtual y ver si hay nuevas notas, con el objetivo de acabar con la incertidumbre y empezar a darles vueltas y revueltas.

Post-parciales también es la época donde las calculadoras ya salen a relucir para hacer los típicos cálculos de "qué nota debo sacar en el final para aprobar la asignatura" y ya empezamos a hacer cábalas sobre el cuatrimestre que viene. Cábalas que, como sucede en el fútbol americano, no servirán para nada una vez llegue el momento de la verdad. Es la época en la que decides qué asignaturas te tomas con calma, qué asignaturas te van a putear hasta finales y qué asignaturas te dejas para el cuatrimestre que viene sin contemplaciones.

Y eso que quería escribir una entrada relacionada con el tema de la cancelación de vuelos por todo el continente gracias a la nube de cenizas... Si eso cuando la tormenta amaine...

Y sobretodo, una canción resonando en mi cabeza permanentemente, a este paso tendré que nombrarla "Entrada más fuerte del año".

domingo, 11 de abril de 2010

Telarañas

Mi última entrada hasta la de hoy data del día 3 de Abril, hace exactamente ocho días. Hace ya mucho que perdí la poca inspiración que me quedaba. ¿La culpa? Como la mayoría de veces es de los exámenes.



Los exámenes me absorben, viven de mi miedo; viven de lo que yo les puedo dar. Un poco como los piojos, la solitaria, o los bichitos microscópicos estos que todos tenemos en las pestañas. Sí, esto último me ha quedado un poco asqueroso. Y me la suda mogollón. Porque estoy de exámenes.

Mentiría si dijera que sé vivir sin el miedo de estar pendiente de un hilo. El miércoles pasado, subiendo al exámen de Matemáticas (no es que suba al carnet de conducir, es que de la estación de Terrassa hasta el campus de la UPC hay una subida, para más inri, los exámenes los hacemos en el segundo piso) recuperaba de nuevo viejas sensaciones que creía olvidadas en Enero. La incerteza, los nervios, el miedo, las ganas de mear cuando el profesor reparte los folios... todo eso. Tengo que confesar que lo echaba en falta; un poco como cuando terminé mi única relación con una chica. Ella fumaba (y supongo que lo sigue haciendo), pero yo, durante semanas; estuve intentando aspirar el humo que soltaban los demás. No sé si se pueden comparar los dos casos.

¿El examen? Bien, gracias. He ido diciendo por ahí que fue puro trámite, o sea que a estas horas es probable que un hada hija de puta, sicaria de Murphy, haya bajado a la tierra y haya transformado mi notaza en un suspenso. Es lo que pasa por ir diciendo estas cosas...

Y mañana Economía. Uuyy, qué divertido... He estado haciendo tests de los temas como loco (sobretodo hoy, en la magnífica Biblioteca de Ciencias Sociales de la UAB), pero no llego a hacer ninguno perfecto. Creo que mañana los nervios me pasarán factura. Y pasado mañana, Materiales. Intentaré reventarla al máximo.

Hablemos ahora de la "Operación Talayot". Adelanté algo en posts anteriores, pero no dije demasiado. Nos vamos a Menorca este verano dos parejas, uno que se deja la novia aquí y un gilipollas, adivinad quién es el gilipollas. Exacto. Playa, hotel, playa, visitas a X sitio, playa, comer y cualquier otra actividad con playa intercalada. A mí no me miréis, ha sido cosa de las chicas. Si fuera por mí ya estaría preparando la cámara de fotos para fotografiar la estación central de Berlín, pero no hubo manera.

Vaya por delante que el plan me gusta, excepto por lo de la playa. Los yonkis de este blog sabéis que es difícil encontrarme en alguna playa durante el verano; pero supongo que es el precio que tengo que pagar para tener un verano inolvidable. Este tema viene a cuento de que hoy, a todavía 88 días para nuestra partida; he sentido por primera vez las ganas de irme.

Hala, ya he quitado las telarañas del blog, hemos echado unas risas y demás. No sé cuando volveré a escribir, espero que sea más tarde que temprano...

sábado, 3 de abril de 2010

En abril, movidas mil

Abril suele ser un gran mes; lleno de movimiento. Es imposible aburrirse en un Abril conmigo. Tenemos la Semana Santa, mi cumpleaños, otros cumpleaños, los compases finales de la mayoría de ligas deportivas (este año con varios Real Madrid - Barça incluídos) y last but not least la temporada de exámenes parciales del cuatrimestre de primavera. Eso es lo mejor de todo.

Llevo días estudiando para ellos, concretamente, desde el principio de las vacaciones. Este año, me he estado juntando con parte de mi ex-gente de Superiores, de modo que he retomado un poco su modus-vivendi de "estudio, me alimento, estudio, me tomo un café, estudio, descanso pensando en estudiar y después estudio otra vez". Vamos, lo que debería haber hecho en mi etapa de Ingeniería Industrial y que no hice. La biblioteca de ciencias sociales de la Universitat Autònoma de Barcelona es la nueva Meca; allí donde lo imposible se hace posible; donde los suspensos estrepitosos se previenen y se convierten en aprobados cultivados con sangre, sudor, lágrimas y otros fluidos corporales.

¿Por qué allí? Fácil, la biblioteca del Campus de Terrassa de la UPC no está abierta las 24 horas; lo cual obliga a todos estos aspirantes a Ingeniero/a Industrial (o de Caminos, o Aeronáutico, incluso a un humilde aspirante a Graduado en Ingeniería Mecánica como yo) a pegarse un viajecito hacia la envidiada y difamada a partes iguales UAB. La dicha biblioteca es la única que abre 24 horas y eso provoca que esté siempre llena de gente.

Más cosas. Durante la madrugada de anteayer y ayer celebré mi cumpleaños una semana antes de lo que tocaría. Los planetas del Sistema Solar se alinearon con los que orbitan en torno a Alpha Centauri; permitiendo que la mayoría de mis amigos estuvieran disponibles para ese día, asi que a ello fuimos. Digamos que me lo pasé bien pegando patadas en los cojones a mis Principios Fundamentales.

Con los regalos, he notado que mis amigos intentan claramente convertirme en uno de ellos año tras año, aunque no lo consigan del todo. Todos ellos llevan suéteres de la Pull & Bear excepto yo. Toma suéter de la Pull & Bear. Ellos odiaban los zapatos que me compré en la tienda Skechers de la West 42nd con la Séptima Avenida en Nueva York y yo los consideraba una parte de mi. Simbolizan (o simbolizaban) mi yo post-Nueva York. Ahora me han regalado unos nuevos con la intención de que tire a la basura los zapatos de Nueva York. "See ya, folks!"



Qué más...? Ah, sí! Creo que estoy recuperando la pasión por la fórmula 1. Sin duda alguna, pondría un vídeo del GP de Australia a cualquiera que me pidiera aficionarse a este deporte. La carrera de mañana pinta bastos para los Ferrari, opinión en la que coincidimos por primera vez alonsistas, massistas y resignados.

Y todavía queda mucho Abril por delante...