lunes, 25 de julio de 2011

Da King

Hoy es un soleado y tranquilo día de 1985. En la emisora VRock suena algo de Megadeth, mientras las aguas del Atlántico se extienden ante mí como una estera azul celeste, interrumpida abruptamente por edificios de apartamentos que años más tarde serían calificados como "horteras".



Todo cuanto hay ante mí tiene mi huella. Cuando digo que esta ciudad es mía es porque físicamente lo es. La he comprado, es de mi propiedad y hago con ella lo que me sale de la punta. Mis tentáculos se extienden desde los ceniceros del club Malibú hasta la mesa del Alcalde, desde la mierda que pasan los camellos de Little Haití hasta la cocaína de diseño que el jefe de la policía de Vice City esnifa dos días por semana en garitos de alto estánding. Desde el grasiento queso de los Well Stacked Pizza hasta el exqusito caviar que se zampan los banqueros del Downtown.

Bueno, no solamente la he comprado, claro está. Eso costaría mucho dinero, digamos que me la he ganado. Cuando empiezas con 0 dólares en la cartera tienes que empezar desde abajo, y para llegar a abajo tienes que empezar a hacer trabajillos para mi todavía amigo Ken Rosenberg. Ahora además de "amigo" es mi abogado personal. Cuando tienes tantos enemigos como yo, lo necesitas con más asiduidad de la que te gustaría.

A partir de Abajo, un poco de todo, nada que a mi abuela le gustara como os podéis imaginar. Trapicheo, asesinatos a sueldo, carreras callejeras clandestinas, robos, matanzas por que sí, tiroteos simplemente porque alguien nos cae mal, asaltos a casas, asaltos a mansiones, demoliciones controladas... El respeto emana de este tipo de acciones, y el respeto conlleva el tener unos cuantos retratos de Benjamin Franklin en la cartera. Digamos que no voy corto de pasta.

Llega un momento en que decides no ser tú el que aprieta el gatillo, contar billetes es menos arriesgado y sienta mejor al cuerpo y la mente; es cuando primero compras un bar. Luego un prostíbulo. Luego un casino. Luego un edificio de apartamentos. Luego... la ciudad entera, con sus estamentos políticos y todo. Cualquier cosa que oigas sobre el gobierno de esta bendita ciudad, ha sido previamente planeado por mí y por mi banda (qué coño, por mi banda, pensar es muy cansado...)

Ya lo ves... Esta ciudad, esa lancha fuera-borda que ves ahí afuera y este traje tan chulo que llevo puesto me los he ganado con el sudor de mi frente y con las balas compradas en los Ammu-Nation de por aquí. Nadie dijo que fuera fácil, pero alguien tenía que poner "en cintura" a esta ciudad, o sea, rodearla con mi cinturón.

Y ahora... me dedico a vivir la vida, me doy una vuelta con el Ferrari Testarrossa (uy, ¿dije Ferrari? quería decir "Cheetah"), la policía no me dice ni mu pese a ir a unos 140 km/h por la calle, me doy una vuelta por el Pole Position o por los estudios a ver cómo va el negocio, me tiro a la hija de Cortez de vez en cuando y me dejo caer por el estadio para ver los partidos de los Vice City Mambas cuando hay partido previo pago de un traje decente en el Collar & Cuffs. Los trapicheos más guapos se hacen en los palcos VIP del estadio...


De repente, la puerta de doble hoja se abre violentamente, rebotando contra las paredes. Una banda formada por unos 8-10 individuos aparece y en centésimas de segundo, me tirotean con armas automáticas. Casualmente, son del mismo modelo que las que agujereaban los cráneos de sus compañeros hará sólo unos meses. Se aseguran que estoy bien muerto vaciando sus cargadores, igual que han hecho anteriormente con el resto de la banda; ahora, esta ciudad tendrá un nuevo dueño.

A rey muerto, rey puesto. Bienvenido a Vice City.

------------------------------------------------------------------------

Y sí, he estado jugando al GTA: Vice City y mi partida se ha corrompido cuando estaba camino de la cima, haciéndome empezar de nuevo desde la mierda. Supongo que es algo equivalente a que te tiroteen, excepto por lo de empezar de nuevo.

lunes, 18 de julio de 2011

Julio

Mucho tiempo sin andar por aquí, ¿verdad? Lo sé, me he columpiado un montón, pero no por falta de tiempo; simplemente no me ha salido de las pelotas postear. Esto va como va.

Todo este pasotismo no viene especialmente a cuento de nada en especial, llevo unos días de encefalograma plano que me impiden pensar en algo más en "qué día es mañana" y "qué echan ahora en la tele"; por eso ahora tengo que hacer como una especie de resumen de todo lo que llevamos de mes. Vamos a ello.

Rollo Patatero II
Por segundo año, al pie del cañón; o mejor dicho, al pie de la máquina. Esta vez, sin embargo, estoy en otra línea de producción donde hace bastante menos calor pero hay que cargar más peso y tengo que entrar antes (me levanto a las 5 de la mañana). Esto de levantarse tan temprano hace que entre las 5:30 y las 6, las carreteras se pueblen de currantes del turno de mañana como yo, que somos los mismos que colapsamos las salidas de los polígonos industriales a las 2 de la tarde, lo cual lleva a unas reflexiones cuanto menos, interesantes. Quizá otro día me extiendo.

Matrícula
Si hay algo que ha animado el ahora inactivo grupo de Facebook donde los de la clase intercambiamos desde tutoriales para HP hasta vídeos de chinos pegándose hostias; ha sido la inminente jornada de matriculación por internet que tendrá lugar mañana. Los ordenadores ya están a punto (con el Adobe Acrobat, el Java y programas que harían explotar mi ordenador de sobremesa instalados para ejecutar una mierda de aplicación) y la alineación titular también está preparada.

Lo que ya no hay es nervios y tensión. Antaño, cuando los grupos tenían un tope de inscritos, si no llegabas a tiempo y te tocaba matricularte más tarde (penalización por sacar peores notas) podrías no entrar en el grupo que querías entrar y "casualmente" los grupos con mejores profesores se llenaban primero. Ahora eso no va a suceder porque hay un grupo por especialidad así que ya no hay nervios.

Ahora sí, cedo la palabra al speaker del Camp Nou para que cante a los titulares de esta nueva temporada Q5-Q6:

Anuales
-Teoría y Diseño de Máquinas y Mecanismos! (Ué!)
-Sistemas Térmicos! (Ué!)

Sólo Q5
-Resistencia de Materiales! (Ué!)
-Ingeniería de Materiales aka Materiales II! (Ué!)
-Ingeniería de Fluídos aka Fluídos II! (Ué!)

Sólo Q6
-Estructuras y Construcción Industrial! (Ué!)
-Ingeniería Gráfica! (Ué!)
-Accionamientos y Transmisiones! (Ué!) como optativa, ya veremos si está llena cuando me toque matricularme...

Divertido de cojones, vamos; añádele entrar cuatro días a las tres de la tarde y salir tres días a las nueve de la noche y tienes la receta perfecta para El Año Más Duro De Tu Vida.

Videojueguismo
Vuelvo a pasar por otra crisis en SimCity. Sigo sin ser capaz de hacer despegar una ciudad más allá de los 300.000 habitantes, probablemente porque he perdido esa "inocencia" y ese descuido por los detalles que tenía antes, y que me permitía avanzar una ciudad saliera como saliera y petara quien petara, con cosas que sabiendo lo que sé ahora, me hacen estallar los ojos. Ahora todo tiene que salir perfecto, si no, a la mierda; un nuevo fracaso que se estrella antes de despegar. Quizá debería volver a los orígenes, por eso me he descargado el GTA 2 (sí, el que se veía en vista cenital!) para ver si consigo recuperar esa inocencia.

Asuntos de Casa
Digamos que estoy hasta las pelotas. El grueso de las obras ya ha pasado, y hemos entrado en la fase "Seek & Destroy" protagonizada principalmente por mi madre, que opina que cualquier objeto que no se use debe ir irremediablemente a la basura y que todavía no cuenta con un lobby potente que la haga cambiar de opinión.

Eso ha propiciado que durante estos días me sienta como eso que dicen de los vikingos adolescentes que queman sus juguetes montados en una barca y así se hacen hombres. Cambia el lago por el contenedor de delante de mi casa y tienes el drama montado. Maldigo el momento en el que nos metimos en esta vorágine.

Sociabilización
Poca o nula. Antes los fines de semana eran días sin universidad entre semanas de universidad, durante los que hacías las cosas que necesitabas hacer inminentemente para la semana siguiente. Ahora los fines de semana son momentos esperados durante el resto de la semana, celebrados con fuegos artificiales y dignos de grandes festejos. Una quedada para matarnos mútuamente al Call of Duty es un gran evento social y salir a tomar un helado ya requiere los mismos nervios que una Noche Mítica. Estoy en el hoyo.

Calor
Cada año doy la misma perorata sobre lo mucho que odio el verano y éste es excepción. Por mí, ahora mismo firmaba con toda la sangre que me queda después de haber donado parte de ella la semana pasada para que se mantengan estas temperaturas el resto del verano hasta octubre. Igualmente, el parasol del coche sigue siendo necesario cuando éste ha estado aparcado ocho horas cara al sol como un falangista cualquiera.